CRÓNICAS DE FLORIANA

Un poco de Historia...

En 1530 d.C. Malta pasó a manos de la Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, albergando Mdina la capitalidad y la ceremonia pública de juramento de protección a las Islas Maltesa y a sus gentes por parte de los Grandes Maestres de la Orden. Posteriormente en 1571 se mudó la capitalidad a La Valeta, ciudad que fue fundada en 1566, la cual, aunque estaba fortificada, a principios del siglo XVII no era lo suficientemente fuerte para resistir un gran ataque debido al avance de la tecnología de la época que hizo que aumentara el alcance de la artillería.

En 1634 llegó a la Valeta el gran ingeniero italiano Pietro Paolo Floriani para evaluar la seguridad de la capital frente a los ataques otomanos, por petición del Gran Maestre Antoine de Paule quien pidió ayuda al papa Urbano VIII. Así Floriani, en 1935, dictaminó que las fortificaciones de la ciudad deberían protegerse con un conjunto adicional de un sistema defensivo para garantizar que el enemigo no pueda ver directamente las de la capital. La nueva extensión de 4 kilómetros hasta la Portes des Bombes se completó en 1721.

Un año después, el nuevo Gran Maestre Antonio Manoel de Vilhena decretó que la nueva ciudad debería llamarse Borgo Vilhena. Pero el nombre nunca se popularizó, ya que los residentes insistieron en llamar a su ciudad Floriana, en honor al constructor que levantó las líneas Floriana o en maltés Is-Swar tal-Furjana.

En 1798 las fuerzas francesas invadieron Malta y dos días después la Orden capituló. Los malteses se rebelaron y bloquearon a los ocupantes en la zona del puerto con ayuda extranjera. Durante el bloqueo, las Líneas Floriana permanecieron bajo control francés, por lo que los malteses construyeron varias baterías para bombardearlas, consiguiendo la expulsión de aquellos en septiembre. Después llegarían los británicos en 1800, quienes hicieron varias modificaciones menores, como la ampliación de la Porte des Bombes, demolición de algunas puertas y la adición de polvorines.

QUE VER EN FLORIANA / DIARIO DE VIAJE

Hemos disfrutado enormemente con nuestro paseo por Floriana, nos ha parecido una ciudad diferente al resto de Malta, en el sentido de que aquí hay espacios más amplios que en el resto de sus ciudades hermanas. Así pues, el recorrido por lo más importante de la ciudad nos llevará alrededor de dos horas completarlo.

Floriana se encuentra colindando con otras ciudades importantes como La Valeta o Vittoriosa, además desde aquí podemos visitar emplazamientos cercanos (aunque todo en Malta es cercano) como Birkirkara, el Hipogeo, Tarxien y Marsaskala. Lo que recomendamos y lo que sería ideal es combinar en un mismo día las visitas de Floriana y Vittoriosa (o Birgu) y si nos sobra tiempo ver Senglea.

CONCLUSIONES E IMPRESIONES:

Floriana es una ciudad coqueta y pequeña que se puede recorrer en un agradable paseo que nos llevará alrededor de dos horas, quitando las visitas interiores a museos y monumentos. Aquí se nota menos la presencia de los turistas en comparación con la cercana Valeta.

Nos ha encantado la plaza The Granaries, grande y llena de tapas de piedra para los graneros y en conjunto con la estampa de la iglesia es una fotografía que todo viajero debería tomar si viaja a Malta. No hay que olvidar las Líneas Floriana, Patrimonio de la Humanidad.

Aquí encontramos una patizzería que, como su propio nombre indica, hacen pastizzis (una especie de hojaldre relleno de queso o guisantes con queso) riquísimos a un precio muy económico junto al Police Hearquarter.

¡Buen viaje y felices experiencias!