CABO MADONA: EL EXTREMO DE LA PENÍNSULA

El Rt Madona o Cabo Madona es la parte más occidental de la península que forma parte de la ciudad de Pirán. Aquí, a unos 300 metros de distancia de la orilla y extendiéndose a una profundidad de 38 metros (el punto más profundo del Golfo de Trieste), se encuentra el Naravni spomenik Rt Madona o Monumento Natural del Cabo Madonna (aunque los locales lo conocen como “Podvodni Triglav”) que constituye el hogar de diversas plantas acuáticas y multitud de animales. Eso dentro del mar, fuera podemos disfrutar del paseo marítimo que recorre la costa, desde el cual se pueden obtener magníficas vistas hacia el mar, además de bonitas puestas de sol.

En este camino, que por cierto está atestado de restaurantes, bares y cafeterías, los turistas y locales colocan su toalla sobre las piedras que forman el rompeolas o en el propio paseo marítimo para refrescarse y darse un chapuzón en los meses de verano. Y es que las playas no son de arena, sino de rocas, por ello, estratégicamente situadas a cada pocos metros, se encuentran unas escaleras para ayudar al bañista a entrar y/o salir del mar. En las propias rocas del rompeolas se sitúa la escultura de una sirena, tallada por un artista local directamente sobre la piedra.

En el lado urbano, unos metros antes de llegar al propio cabo, se pueden ver los restos de la antigua muralla en la que se abre la Miljska vrata o Porta Muggia, construida en el siglo XIII, una de las puertas más antiguas de la ciudad. Algo más adelante se levanta la Cerkev Marije Zdravja o iglesia de Nuestra Señora de la Salud, consagrada originalmente en 1274 a san Clemente, el santo patrón de los marineros.

En el año 1631 el templo fue rebautizado con el nombre actual, tras las terribles epidemias de peste que asoló la ciudad. Fue restaurado en varias ocasiones, completamente remodelado en 1490, muy ampliado en 1736 y, entre los años 1773 y 1778, sufrió una gran renovación en estilo barroco, según planos del arquitecto Zuann Dongetti.

Su interior de una sola nave cuenta con un techo decorado con estuco, en cuya escena central se representa el Amor (Caritas). Esta iglesia cuenta con tres altares barrocos de mármol de Carrara, realizados por el cantero Gaspar Albertini: el Altar Mayor fue construido entre 1778 y 1781 y contiene el relieve de “La donación de María en el templo”; el situado en el lateral izquierdo fue realizado en 1789 y está dedicado a sv. Frančišek Pavelski, mientras que el que se encuentra en el derecho se hizo en 1794 y está dedicado a sv. Alojzije Gonzaga, contando con una pintura (presumiblemente de Matteo Furlanetto) en el que se representa a san Tomás y san Aloysius de Gonzaga.

La parte trasera de la iglesia está encerrada en una fortaleza circular construida en el año 1506. Aquí, mas o menos en el centro, se levanta el antiguo campanario, actual faro (Piranski svetilnik) que fue reconstruido en varias ocasiones, dándole su aspecto definitivo en estilo neogótico, planta circular y una altura determinada como exigían las autoridades militares austriacas, a mediados del siglo XIX. El faro cuenta con tres pequeños cuartos pequeños que fueron utilizados por los guardias. La iglesia, la fortaleza circular y el faro forman un complejo que sirvió no sólo para las necesidades religiosas de la gente de Pirán, sino que también fue un importante punto defensivo, así como un faro para ayudar con la navegación a los marineros.