LA ARQUEOLOGÍA DE MYKONOS EN UN SÓLO ESPACIO

Este museo fue construido en el año 1902 para albergar las piezas cerámicas halladas en la "Zanja de Purificación" (nombre dado a un grupo de tumbas, siendo la más antigua del 426 a.C.), descubierta en 1898 en el islote de Rínia o Renea, situado frente a Delos, por el doctor Stavropoulos. El edificio fue diseñado en estilo neoclásico por Alexandros Lykakis, pero en 1934 se le dio su forma actual. Años más tarde, en 1972, se añadió la sala oriental más grande.

El motivo por el que aquella Zanja Purificadora estuviera llena de esos tesoros hay que buscarlo en aproximadamente el año 426/5 a.C., cuando los atenienses siguieron los dictados de un oráculo que decía que había que purificar la isla de Delos de todos los entierros anteriores. Así se transfirieron los huesos de los difuntos junto con sus vasijas de ofrendas a la opuesta y cercana isla de Rínia, prohibiéndose a partir de aquel momento dar a luz o morir en la isla sagrada de Apolo.

La isla de Rínia, especialmente su costa opuesta a Delos, se convirtió así en un cementerio para los habitantes de la isla sagrada hasta el final del período helenístico (426 al siglo I a.C.). El interior del museo, dividido en 5 salas, un pórtico y dos atrios, acoge casi en exclusiva, exceptuando unas pocas piezas, todos los hallazgos encontrados en el cementerio de Rínia.

Las salas 2, 3 y 5 contienen la cerámica hallada en la "Zanja de Purificación", la cual reveló la existencia de talleres cerámicos en las Cícladas en el período Arcaico. La colección de cerámica incluye objetos producidos en una variedad de talleres que van desde el período geométrico que tuvo su florecimiento en las islas Cícladas en los siglos IX y VIII a.C.; jarrones cicládicos de los siglos VII y VI a.C. procedentes de Naxos, Paros y Sifnos, y también diferentes objetos enviados a Delos originarios de talleres áticos, corintios, de Rodas, de Samos y de Chíos.

Así, en la sala 2 destacamos, entre otras piezas, un kantharoi de Paros del período del geométrico tardío de mitad del siglo VIII a.C.; jarrones procedentes de Sifnos del género subgeométrico de principios del siglo VII a.C.; un jarrón procedente de Naxos con motivos orientalizados también del siglo VII a.C.

Vasos geométricos de Naxos de la segunda mitad del siglo VIII a.C.; ánforas en estilo orientalizado temprano de Naxos, datadas en el primer cuarto del siglo VII a.C.; y otros vasos con decoración orientalizada procedentes de Sifnos y datados en la primera mitad del siglo VI a.C.

En la sala 3 se expone una extensa colección de cerámica ática de figuras rojas y negras, incluyendo importantes obras de vasijas pintadas áticas, como las del Pintor de Cleofonte (nombre dado a un pintor ateniense anónimo especializado en el estilo de la figura roja, después de haberse encontrado en una de las obras que se le atribuye una inscripción en honor a un joven llamado Cleofonte); o las del Pintor de Berlín (nombre convencional dado por sir John Beazley, tras encontrar una gran ánfora en Antikensammlung de Berlín, a un pintor anónimo de jarrones griegos que considerado el rival del Pintor de Cleofonte).

Como ejemplo del Pintor de Cleofonte podemos ver, entre otras, un hydrai del tercer cuarto del siglo V a.C. En la colección también podemos ver un caldero o lebes nupcial que presenta figuras rojas, cuyo estilo se ha llamado convencionalmente Pintor de Míconos. Esta pieza está datada de mediados del siglo V a.C. Junto a él se sitúa otra lebes Nupcial en este caso del Pintor Syriskos y datado en el segundo cuarto del siglo V a.C.

Seguimos viendo piezas pertenecientes a otros pintores, como una copa del siglo V a.C., del llamado Pintor de Koropi. Más extraños son los lekythoi áticos con fondo blanco del tercer cuarto del siglo V a.C. Más allá vemos un peliké realizado por el Pintor Académico, datado en el siglo V a.C., y en el que podemos ver, mediante un agujero, su contenido.

En otro hydrai, de mediados del siglo VI a.C., se representa una escena del juicio de Paris. Al lado se encuentra un peliké, en esta ocasión del llamado Pintor Ángel Volador, datado en el primer cuarto del siglo V a.C.

La estancia central y la más grande de todas, la sala 5, exhibe uno de los objetos más importantes del Museo: un pithoi funerario del siglo VII a.C., con escenas en relieves del caballo troyano y de la caída de Troya. Fue encontrado en Hora Míconos, aunque su procedencia es de la vecina isla de Tinos, en el que floreció un taller especializado en la fabricación de vasijas con relieves.

El resto de esta sala contiene extraordinarias colecciones de cerámica del período Arcaico, Geométrico y Corintio. De aquél primer período podemos ver extensos ejemplos de ánforas tipo Meliana, las cuales, debido a su forma y decoración en estilo orientalizante, se encuentran entre los jarrones más famosos de Grecia. Este estilo se produjo entre el siglo VII a.C. hasta el siglo VI a.C (de momento se conoce que el último de ellos e hizo en el año 580).

Se utilizaron como señalizadores de las tumbas, como se haría posteriormente de igual forma con las estatuas y lápidas en relieve, además de ser utilizados como objetos de culto en los santuarios. Por ello, con la creciente producción de la escultura, este tipo de ánforas dejaron de fabricarse.

Del estilo geométrico vemos piezas, como por ejemplo, un ánfora encontrada en Thera y datada a finales del siglo VIII a.C. Cerca vemos la representación orientalizada de un león en otra jarra del siglo VII a.C. Al lado podemos ver un ánfora clazomenia del siglo VI a.C.

La variedad de piezas es tal que incluso la exposición incluye, por ejemplo, un jarrón de Beocia con figuras negras encontrado en Tebas y regalado al museo por M. Kampanis. Más allá vemos unos jarrones corintios decorados con figuras negras.

La sala 1 y 4 se encuentran respectivamente al sur y al norte, a cada extremo del edificio. En la pequeña sala 1 podemos ver diferentes ofrendas que se han encontrado en el cementerio de Rínia y que se encuadran tanto en la época helenística como romana.

En el centro de la estancia se expone un kouro de bronce de mediados del siglo VI a.C, el cual tenía la función de ser el pie que mantenía una pátera. También se expone un vaso cicládico encontrado en Mykonos y datado en la primera mitad del tercer milenio a.C.

En varias vitrinas se exponen multitud de objetos encontrados en las tumbas de Rínia de los antiguos habitantes de Delos. Entre ellos vemos diferentes figuras, collares, pendientes, pequeñas esculturas, joyas, etc... Al lado vemos los objetos encontrados en la tumba A que pertenecía a un escultor.

En la sala 4 se exponen una series de estelas helenísticas funerarias, cuyas fechas de datación van desde el siglo II a.C. al I a.C. De entre ellas destacan las pertenecientes a los templos de Tertia Horaria y la de Glykon. En la primera se representa al difunto sobre las rocas observando un barco, en la segunda a la fallecida extendiendo el brazo a su marido, mientras un pequeño esclavo sostiene sus joyas.

La zona externa se compone de dos atrios y un gran pórtico. En esta parte también se exhiben diferentes estelas funerarias y esculturas, entre otros objetos. Podemos ver muchas estelas funerarias de la época helenística de entre los siglos II y I a.C.

Una de las piezas que nos llamó la atención fue la escultura funeraria circular en la que se pueden ver representados motivos vegetales y animales. Se trata de un objeto datado en la primera mitad del siglo I a.C. Alrededor se exponen otras esculturas que visten la clásica toga.

En el recorrido podemos detenernos para ver cada detalle de las estelas, algunas son tan precisas que es posible imaginar la historia que cuenta en ese momento del difunto. Aquí también vemos un sarcófago de piedra caliza datado en el siglo V a.C. y hallado en la zanja de Purificación.

Una vez finalizada la visita al museo y una vez en el exterior del mismo, es recomendable, para digerir tanto arte, disfrutar de las vistas que obtenemos desde aquí de todo el Puerto Viejo, además, desde esta ubicación también tenemos buenas panorámicas sobre el nuevo puerto de Míconos, Tourlós, situado a tan sólo 2 kilómetros de Hora y donde los gigantescos cruceros y barcos de línea atracan.