La calle principal es Damrak que va desde la estación central hasta la plaza Dam. Esta avenida divide en dos a la ciudad: Oudezijde (hacia el este) donde se encuentra entre otros, el barrio chino; y Nieuwizijde (hacia el oeste) que esta circundado por la telaraña de canales.
Vamos a empezar nuestro recorrido precisamente desde la estación central (Centraal Station) construido en 1889. Se puede decir que es el centro de la ciudad y que a partir de aquí se abre esta fascinante ciudad.
Muy cerca de la estación central se encuentra la Iglesia católica de San Nicolás (ST. Nicolaaskerk) construido en el siglo XIX. Inmediatamente justo enfrente encontramos el susodicho Damrak (rellenado a finales del siglo XIX). Lo primero que encontramos en ella es el palacio monumental de la Beurs o Beurs van Berlage, construido entre 1897 y 1903 se considera la mejor muestra arquitectónica de la ciudad (Horario: 10h - 16h. lunes cerrado).
Oude Kerk o Iglesia Vieja (Horario: 11h-17h; Domingos e inviernos: 13h-17h). Como su nombre indica es la iglesia más antigua de Ámsterdam, siendo su datación del siglo XIV. Empezó siendo una basílica, siendo reconstruidas muchas veces hasta que en el siglo XVI obtuvo su actual forma gótica. En su interior destacan el órgano Müller, las bóvedas y las vidrieras. Y entre las tumbas que pueden verse de entre los siglos XVII y XVIII destaca la de Saskia, primera esposa de Rembrandt fallecida en 1642. Desde su campanario, coronado por una enorme aguja de madera, se obtienen unas espléndidas vistas de la ciudad.
Llegamos inmediatamente a la mundialmente conocida como Plaza Dam. Estamos sin duda en el corazón histórico, durante más de cinco siglos, de la ciudad. Actualmente es un lugar animadísimo, lleno de ambiente, juventud y multiculturalidad. Recibe su nombre de una antigua presa que cruzaba el río Amstel, palabra que proviene de su antiguo nombre Amstelledame, por cierto, de ahí el nombre de la ciudad.
La cara este de esta plaza está ocupado por el imponente monumento a las víctimas holandesas de la Segunda Guerra Mundial o Nationaal Monument op de Dam, construido en 1956, según diseño del arquitecto holandés Jacobus Oud. Las esculturas son obras de John Rädecker y sus hijos Han y Jan Willem Rädecker, mientras que los relieves fueron realizados por el escultor Paul Grégoire.
Después está el Koninklijk Paleis o Palacio Real, se construyó entre 1648 y 1662 en estilo neoclásico y con la intención de albergar el ayuntamiento, aunque con la invasión de Napoleón y su decisión de colocar a su hermano Luis Napoleón en el trono, se convirtió en palacio.
A la derecha del Palacio Real se encuentra Nieuwe Kerk (Horario: 10h-18h; jueves: 10h-22h): en esta basílica gótica, desde 1814, se coronaban a los soberanos. Se comenzó a construir en 1408 aunque se volvió a reconstruir doscientos años más tarde por culpa de un incendio. Su interior de tres naves iluminadas por setenta y cinco ventanales de tracería, guarda tesoros como el órgano, el púlpito de madera (1649), la verja de latón del coro (1650) etc...
Destacamos en esta plaza el Madame Tussaud Scenerama, ya sabes, el museo de cera hermano del de Londres. También destacamos justo detrás del Palacio Real el Magna Plaza, lujosas galerías para ir de compras, situado en un bello edificio.
Un paseo por la avenida Oudezijds Voorburgwal y sus alrededores es más que obligada. Esta zona, antiguo barrio marinero, guarda joyas como la llamada Torre de las Lágrimas o en holandés Schreierstoren, construida en 1482 en el punto de embarque de la ciudad. Esta torre se encuentra en el barrio chino (Prins Hendikkade) manteniendo el ambiente en que los marineros bebían vino y visitaban a las prostitutas, de hecho, en sus callejuelas hay multitud de escaparates con chicas ofreciendo sus servicios, así como cafeterías. Pero alguna cosa mala tendrá Ámsterdam, y es que en esta zona y en el barrio rojo, hay mucha gente ofreciéndote drogas duras (recordamos que son ilegales) y eso llega a ser molesto.
Otra de las cosas que sorprenden y llama la atención es el Barrio Rojo, tono que adopta sobre todo cuando anochece por las luces de neón de ese color y otros colores. En este barrio tened cuidado, no saquéis vuestras cámaras de fotos, puesto que está totalmente prohibido hacer fotografías. Tal vez cabe la posibilidad de pagar a alguna para que puedas hacerle una foto, pero es una posibilidad casi imposible, pues casi cada escaparate con su respectiva prostituta tiene un vigilante que se confunde con la gente.
Eso me recuerda cuando pasamos por una calle muy estrecha, de casi metro y medio, había muchas personas (el 99 % eran hombres) mirando los escaparates y pasando ante el bullicio, aquello me impresionó, y la verdad, es una lástima no haber hecho una foto de aquel momento para que lo veáis. Dicho sea de paso, las mujeres que visiten este barrio no deben temer ser confundidas con prostitutas, puesto que en Holanda la prostitución en la calle está totalmente prohibida, pasa igual que las drogas blandas, se pueden consumir en sitios apropiados, pero nunca en la calle.
Seguimos nuestra ruta por esta parte de la ciudad, ahora en Begijnhof, un patio rodeado de un grupo de casas (reconstruidas en el siglo XVII) con una iglesia clandestina metida entre las mismas. El recinto se fundó en 1346 como residencias de las beguinas, llamadas así a unas mujeres viudas y adineradas que cuidaban de los ancianos y a la oración. Es aquí donde encontramos la casa más antigua de Ámsterdam, una de madera construida en 1475. Para llegar a Begijnhof es necesario entrar por una portezuela al norte del Spui.
Y llegamos al punto donde se unen los canales de Singel y Rokin, la Muntplein: en la cara de la plaza que da a la orilla del Singel está el mercado de flores Bloemenmarkt, si bien toda la plaza está dominada por la Munttoren o Torre de la Ceca o Moneda (s. XV). Formaba parte de una de las puertas de la ciudad, antes de que ésta se quemara en 1619, en su restauración se le añadió el campanario un año más tarde, en 1620.
Algo más allá encontramos el antiguo mercado, convertido hoy en el Rembrandtplein, una de las plazas más concurridas, llena de cafés, edificios históricos. El centro de la plaza está coronada por la estatua de Rembrandt datada del 1852.
En esta plaza se encuentra uno de los coffe shop más grandes de Ámsterdam contando con cinco plantas. Hablando de coffe shops, una de las cadenas de este tipo de establecimiento que goza de mucha fama popular son los llamados The Bulldog.
Para terminar esta sección del centro de Ámsterdam, os ponemos una relación de museos: Museo del Sexo, este espacio expositivo es apto sólo para mayores de 16 años. En su interior puedes ver fotos antiguas, dibujos, maniquís, grabados, etc., y todos de temática erótica. Mientras que en el Museo Erótico se exponen, además de fotografías y artilugios varios, objetos sadomasoquistas y en general todo lo relacionado con el porno y el sexo.
El Museo Allard Pierson o Museo Arqueológico de la Universidad está alojado en un palacio neoclásico de 1869l. Destaca sobre todo la sección egipcia y la de vasos y ánforas. Aunque también podrás ver objetos procedentes de Oriente Próximo, Grecia, Chipre, Italia y Roma. En el Museo del Hachís y Marihuana (o Hash Marihuana & Hemp Museum) se cuenta, de manera pedagógica, la historia de esta sustancia, tanto su cría, como su relación con la religión, etc.
Continuamos con el Museum Ons' Lieve Heer op Solder o Museo de nuestro Señor en el Ático, cuyo ático, como dato curioso, fue una Iglesia católica clandestina durante la prohibición calvinista en 1578. Además, se exibe una colección de objetos del culto católico. El Amsterdam Historisch Museum ocupa actualmente el edificio del convento de San Luciano del siglo XV, que albergaba un orfanato. Fue restaurado en dos ocasiones en el siglo XVII y una en el siglo XVIII, aunque sus 23 salas fueron organizadas en 1975 para contar a través de fotos, pinturas, vídeos, etc. la historia de Ámsterdam.
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