PLAZA DEL AYUNTAMIENTO

La plaza del Ayuntamiento es un espacio triangular ajardinado resultado de la demolición en 1891 del Convento de San Francisco que ocupaba toda esta área. Aquel edificio fue construido tres ser concedido por Jaime I el Conquistador en 1239. Pero en 1835 con la desamortización de Mendizábal, los monjes franciscanos tuvieron que abandonarlo, convirtiéndose en el Cartel de Caballería. Por su situación de deterioro y por razones urbanísticas finalmente el convento fue demolido dando origen a la futura plaza del Ayuntamiento.

A lo largo de los años este lugar ha sufrido diferentes reformas y añadidos decorativos, así en 1903 se colocó la estatua del pintor Ribera (situado previamente desde 1888 en frente del palacio del Temple) manteniéndose en la plaza hasta el año 1931, momento en que se llevó a la plaza de Teodoro Llorent. Entre 1909 y 1922 estuvo decorado por la escultura del marqués del Campo (actualmente situado en la plaza Cánovas del Castillo). Desde 1964 hasta 1983 había una estatua ecuestre de Francisco Franco, en su lugar se colocó, en 1993, la actual escultura dedicado a Francesc de Vinatea, obra de Manuel Rodríguez Vázquez.

Una de las construcciones que más destacan es el propio Ayuntamiento, trasladado aquí en 1854 de forma provisional desde la antigua Casa de la Ciudad que se encontraba en el actual jardín del Palau de la Generalitat. Por aquél entonces la Casa Consistorial ocupaba lo que era la Real Casa de Enseñanza, construido entre 1758 y 1763, que acogía una institución creada por el arzobispo Andrés Mayoral que se ocupaba de las niñas sin recursos. Aunque el traslado era provisional, finalmente las dependencias municipales ya no abandonarían el edificio.

Así, a la antigua Casa de Enseñanza se le añadió entre 1901 y 1904 distintas dependencias y una importante reforma general y ampliación en 1915, incluida la amplia fachada, diseñada por los arquitectos Carlos Carbonell Pañella y Francisco Mora Berenguer. Hoy en día el Ayuntamiento cuenta con una extensión de 6.173 m2 y cuatro fachas, siendo la más monumental la que da a la misma plaza. En su interior destacan una escalera de mármol en estilo neoclásico de 1924, reconstruido después de la Guerra Civil Española; el Salón de Fiestas o de Cristal, inaugurado en 1929 por el rey Alfonso XIII, con unas dimensiones de 22,60 por 10 metros y el Salón de Plenos con sus pinturas art decó, obra de Luis Dubón.

En él tiene su sede el Museo Histórico de la Ciudad creado en 1927. En sus cuatro salas se exponen diferentes objetos, documentos y códices medievales de la historia de la capital. La sala más importante de este museo es la llamada Sala Foral, correspondiente casi íntegramente con lo que fue la iglesia de la antigua Casa de Enseñanza, la llamada como Capilla de Santa Rosa de Lima. De ella se conservan in situ la portada, la bóveda y las pinturas murales.

Otro de los edificios que destacan en esta plaza es el de Correos o palacio de Comunicaciones, el cual comenzó a construirse en 1915, según proyecto del arquitecto Miguel Ángel Navarro, e inaugurado en 1923. Se levantó ocupando parte del antiguo barrio de los pescadores con la intención de sanear y dignificar la zona al encontrarse cerca del ayuntamiento, ya que era un lugar de bares de borrachos y prostitutas. El edificio a grandes rasgos responde al eclecticismo dominante en la época, arquitectónicamente hablando.

El cuerpo saliente de mayor altura que da acceso al interior cuenta con un arco de medio punto, dobles columnas jónicas y figuras alegóricas. En el tímpano se encuentran cinco figuras que representan los cinco continentes clásicos, es decir Europa, Asia, África, América y Oceanía. Sobre la triple arcada de la portada principal se sitúa el escudo de la ciudad de Valencia.

En el remate del cuerpo central, a cada lado, se haya un grupo escultórico de seres alados, obras de Víctor Hino, transportando postales y telegramas, simbolizados en forma de cartas y rayos. Uno de ellos se apoya sobre una locomotora y el otro sobre un navío. Los mensajes postales por aire todavía no se habían establecido. Coronando el edificio vemos una estructura metálica con forma de torre que en su momento correspondía con el de telecomunicaciones. Ese poste cuando cayó en desuso fue eliminado y recientemente, en 2004, se ha vuelto a colocar una réplica exacta. La torre mide 30 metros de altura, corriendo en su interior una escalera de caracol que permite la subida a un mirador. En el interior del edificio, destaca el Salón principal cubierto por una gran vidriera compuesta por 370 paneles y unas 3.500 piezas de vidrio.